Al paso de los años es inevitable que la costumbre se haga presente, la fortuna es que la costumbre siempre viene acompañada por la comodidad, así que más que continuar atormentandome con dudas existenciales abrazo a la incertidumbre, a el no saber, a estar consciente de la imposibilidad de conocerme por completo... y me sorprendo con mis acciones, porque cuando la debilidad llega y siento el fracaso doy ese paso más que no sabía que sería capaz de darlo.
Sé de mi lo que he aprendido y eso me ayudará, pero no me exonera de nuevos errores, no conozco por completo mi derrota, no conozco por completo mi fuerza.
Y así las dudas continúan sin ninguna prisa, con estas cómodas respuestas ante el enfrentamiento.
Ofelia
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