con palabras justas
para un adiós ensayado.
Se amaron
sabían bien que se amaron,
se amaron hasta el punto de perderse,
hasta el punto de ya no reconocerse individualmente.
Y no había más que compartir,
y por lo que se habían amado había desaparecido,
lo consumieron,
lo controlaron...
se abandonaron.
Ahora el uno no es sin el otro,
pero tampoco lo son juntos.
Ahora los dos tendrán que extrañarse,
ahora los dos tendrán que volver a encontrarse.
Ofelia Balderas Gallegos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario