Pasa, pasa que pierdes el tiempo, que se te van las oportunidades, que pierdes... muchas cosas, se reduce tu vida en la espera de aquello que sería el móvil para conducirte a tus logros...
Hoy me di cuenta que esperé mucho tiempo... que esperaba algo que me daría la felicidad, la seguridad para poder recuperar lo que en algún momento me hizo sentir realizada, sí, esperaba una ilusión para poder hacer lo demás, lo que complementaría mi vida...
A veces es así, cometemos el error de querer tener lo mas grande, para continuar realizando las pequeñas cosas, y mientras esperamos estamos medio muertos, pero llega el momento de enfrentar, de ver la realidad, de observar lo que esta pasando... y reconocer que si se sigue por el mismo camino continuarás medio muerto hasta que sea definitivo.
Cuando la vida se trata de pequeñas cosas, de pequeños detalles que la hacen un todo, no es vida esperar "el tramplolín a la felicidad".
Y esta historia es de todos aquellos que esperan algo para después ser... el deseo, ¿pero cuando el deseo no es lo que creías?... cuando lo sabes una ilusión, que no esta, no existe, que solo lo esperas... ¿y lo demás?, el deseo no detiene al tiempo.
Hoy me decidí a demostrar lo que puedo hacer, a recuperar lo que creo que vale la pena, a apoyar aunque me duela estar ahí, a ser menos egoísta, a vivir y arriesgarme... simplemente me decidí a no esperar para ahora solo actuar.
Ofelia Balderas.
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